Un domingo cualquiera
Para la mayoría de los mexicanos, mencionar las palabras “deporte” y “domingo” en el mismo enunciado, nos remite al sillón de la sala, fútbol y un televisor. Un domingo cualquiera nos ofrece mucho más que eso.
 La carrera, quizás el deporte menos demandante y más generoso que existe (por la austeridad de su práctica y los evidentes beneficios que proporciona), tiene precisamente al domingo como un día establecido para el calendario de competencias en nuestro país.
En este caso en particular, el pasado fin de semana -6 de mayo de 2007- se celebró el medio maratón (21 kilómetros) de ESPN, “Corre por tu vida”, con sede en las instalaciones del Hipódromo de las Américas. Más de 1,600 personas formaron parte de la carrera dominical, de las cuales seguramente menos de 20 de ellas eran atletas de alto rendimiento, es decir, deportistas dedicados de tiempo completo a la carrera.
 ¿Por qué participar en una competencia en la que no es una prioridad incondicional cruzar la meta en la primera posición? Podrá sonar a cliché, pero la respuesta radica dentro de cada uno; superar mi propia marca, demostrar que puedo hacerlo, correr por una causa en particular, simplemente hacer ejercicio, son algunas de las razones por las cuales toda esta gente participa, y lo mejor es que no lo hacen solos...
Madrugar en domingo
Los corredores encuentran su motivación en las gradas o en los costados del circuito. Desde el punto donde son observados, allí está su porra, el motor de sus piernas.
 La cita estaba marcada a las 7:30 de la mañana, un horario que para muchos parece no existir en domingo. Sin embargo, para estos aficionados, el compromiso va más allá de levantarse temprano; lo asumen como parte de su cultura, de su vida cotidiana, es un día familiar.
Comenta Enrique López (72 años) que vino desde Querétaro para ver competir a su hija: “Yo vengo a apoyar a todos, a mi hija en particular, pero a darle ánimos a todos”. Enrique sabía que las posibilidades de llevarse la “victoria” (tan relativa como uno la quiera ver) eran escasas, por no decir que nulas, pero es que no era ese el objetivo. “Sé que no va a ganar, pero no venimos por eso”.
Con sus dos pequeños acompañándola en la explanada del Hipódromo, Ángela Morales (34 años de edad) trata de inculcar a sus hijos una vida deportiva. “Me encantaría ver, en unos años, a mis hijos corriendo en una competencia de estas, así como su papá. Enseñarles que los retos son emocionantes”.
 Argelia Velasco (24 años) fue a apoyar a su novio: “ El ambiente es muy familiar. Toda la gente que ves aquí viene a apoyar. Se necesita del estímulo de la familia para que se disfrute la carrera”.
“Corre por tu vida”, la carrera
Este es el slogan del medio maratón que ofreció ESPN. Es común que las carreras tengan una temática.
Cerca de la hora puntual, los corredores se agruparon en el “infield” del Hipódromo. Los 21 kilómetros, que tuvieron salida y meta en el óvalo de la pista central, dieron inicio exactamente a las 7:30.
 Los más de 1,600 corredores (entre la rama femenil y varonil, todas las categorías) rompieron en euforia para iniciar el trayecto que incluía las avenidas de Ejercito Nacional y Reforma hasta el Ángel de la Independencia, y de regreso a la pista del Hipódromo.
Nombres conocidos en el mundo del atletismo de fondo comenzaron a sonar desde el inicio de la competencia. El pelotón puntero fue liderado por Procopio Franco y José Luis Villanueva desde los primeros metros hasta el kilómetro 14.
 A no muchas zancadas de concluir la carrera, cerca de alcanzar el kilómetro 18, Tomás Pérez Nava se amarró en la punta del pelotón, con José Luis Villanueva siguiéndole de cerca.
Conservando la distancia a esas alturas de la competición, Tomás supo que la victoria sería suya. Se mantuvo con paso firme hasta que se le vio aparecer una vez más en el óvalo del Hipódromo.
Con varios segundos de ventaja, Tomás cruzó la meta en un esfuerzo que lo deja plenamente satisfecho; su crono, 1 hora, 9 minutos y 31 segundos. “Yo soy corredor de montaña, por eso significa un gran triunfo para mí el haberme llevado la victoria hoy”, comentó el mexiquense.
Reconoció que, al no ser un corredor rápido, tuvo que valerse de la estrategia para ganar y mejorar su tiempo individual en medios maratones. “Empecé lento porque no soy un corredor de mucha velocidad, pero me mantuve a distancia de Villanueva, y cuando alcanzamos el kilómetro 17 no dejé ir la punta”, apuntó el campeón absoluto varonil, quien se enfoca al próximo maratón de San Luis Potosí.
La segunda y tercera posiciones correspondieron a José Luis Villanueva y Gerardo Becerra.
En la rama femenil, las cosas se dieron de manera mucho más clara desde el inicio. Fue Edna González quien dominó por completo la jornada. El tiempo que registró la originaria del Estado de México fue de 1 hora, 23 minutos y 50 segundos: “Es muy importante haber ganado hoy porque es la primera vez que corro medio maratón. Me quedo muy contenta con mi tiempo”.
Edna tiene sólo tres años en el mundo del atletismo de fondo, siendo su fuerte las distancias de 5 y 10 kilómetros. A pesar de no estar acostumbrada a las características de un medio maratón, supo tomar ventaja de sus rivales. “Desde el principio tomé la delantera y así me fui hasta el final. En realidad nunca sentí la presión de mis compañeras”, destacó.
Elizabeth Zárate terminó en la segunda posición y Esmeralda Guillén en la tercera.
El incomparable sentimiento de la victoria
En el papel, Edna y Tomás se adjudicaron las victorias importantes. Sin embargo, fueron los rostros y ademanes de felicidad de cientos de corredores los que hicieron vibrar en aplausos las gradas, sin importar el orden en el que llegaron.
 La expresión de un corredor (atleta o no) al cruzar la meta, una vez que cumplió el objetivo trazado, logrando dejar atrás el reto simbólico de los 21 kilómetros, fue suficiente para percibir en el ambiente el sentimiento de la victoria.
Al igual que en muchos otros casos, así sucedió con la participación de Renata Buerón Valenzuela (26 años). Sólo seis meses tras su incursión en la disciplina y ya está corriendo medios maratones.
 “Es un reto personal”, así lo explica ella. “No pretendes ganar, sólo demostrarte a ti mismo que puedes hacerlo”. Mencionó Renata, quien destacó que se entrenó con los lineamientos que ofrece Nike en el sitio Nikecorre.com. Y para ejemplos de coraje y voluntad, está el de Jorge Ruvalcaba, quien pese a sus 64 años de edad cruzó la meta del medio maratón. Su tiempo fue superior a las tres horas y fue uno de los últimos corredores en llegar. También fue uno de los corredores más aplaudidos.
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Gracias y hasta pronto. Nikecorre.com
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